En donde yo nací , sucedió un caso insólito.
Un señor muy incrédulo, llamado Merewi, que siempre desconfiaba de todo y de las personas, se encontraba sentado a orillas del lago Tana.
De pronto se dió cuenta que una nave aterrizaba a poca distancia de donde se encontraba. Bajaron unas personas, le saludaron amigablemente y le invitaron a subir.
Después, lo llevaron a otro planeta. Ahí permaneció varios día, donde conoció una civilización muy respetuosa y extraordinara.
Le invitaron a quedarse para siempre en su planeta, pero él dijo:
-"Tengo que volver a hablar con los terrícolas, tengo que contar a todos lo que he visto y oído aquí, de este planeta tan justo y maravilloso".
-"Tengo que volver a hablar con los terrícolas, tengo que contar a todos lo que he visto y oído aquí, de este planeta tan justo y maravilloso".
Al día siguiente, regresó a su poblado en el lago Tana.
Desde entonces, ese hombre se dedicó a estudiar otros mundos y otras civilizaciones que nadie conocía.
Kidist (1ºESO)
No hay comentarios:
Publicar un comentario